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COSTA ESTE
La costa este, hasta Lindos, es la parte más turística de la isla. La carretera de la misma conduce a las principales localidades que, en verano, rebosan de turistas que buscan vacaciones de sol y playa. En estos aproximadamente 58 km, encontramos una gran variedad de lugares, paisajes y entornos que satisfarán de una u otra forma al visitante. Aquí se hallan las mejores playas de la isla, de arena fina y clara y de guijarros.
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KOSKINOÚ (KOSKINÚ)
Población, 3.224 habitantes.
A 8 km de Rodas está Koskinoú, un pueblo con cierto aire aristocrático y una belleza que atrae a muchos visitantes de la isla. Varias versiones tratan de explicar la procedencia de su nombre: Koskino en griego significa colador y parece aludir a los pequeños orificios que hay en el terreno que rodea al pueblo; otra teoría se asienta en la tradición que hace proceder a los habitantes de la villa de la antigua Koskinia, localidad que se encontraba en Lidia, península de Anatolia.
El pueblo se compone de dos partes: la más moderna, cuyas casas nuevas son las segundas residencias de los habitantes de la ciudad de Rodas; la parte antigua, formada por calles estrechas y laberínticas (se dice que para despistar a los piratas que en aquellos tiempos asolaban las costas), en las cuales llama la atención la arquitectura tradicional de las viviendas. Las fachadas presentan vivos colores, al igual que los portales, que a menudo lucen arcos, y las puertas, de tonos brillantes, metálicas o de madera, casi siempre están ornamentadas. Muchas de ellas fueron construidas por los otomanos en los s. XVII y XVIII. El interior es igualmente impresionante: las paredes se cubren de platos de cerámica con diversos diseños y colores y sobre sillas, mesas y camas se colocan tejidos artesanales. En los suelos aparecen mosaicos de guijarros blancos y negros al igual que en los patios, adornados con plantas y flores, donde la buganvilla es la más vistosa. Para conocer bien una casa tradicional rodia se puede visitar en el centro del pueblo el Museo de la Casa Tradicional de Koskinoú, donde admirar el cuidado interior y los singulares abalorios.
El 17 de julio se celebra la fiesta de Agia Marina, con bailes y música tradicional. Es todo un acontecimiento.
QUÉ VER
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MUSEO CASA TRADICIONAL: se encuentra en el centro del pueblo y está alojado en una mansión con una bella entrada. Abierto de lunes a viernes, de 10 a 13 h y de 17 a 20 h. ( 22410 62205 y 62612.
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FALIRAKI
Faliraki es una verdadera “ciudad vacacional” donde cada turista encuentra su paraíso particular, tomando el sol, bañándose en unas aguas cristalinas o practicando uno de los muchos deportes y actividades disponibles. Además, la intensa vida nocturna garantiza la diversión a los insomnes. Eso sí, quien busque paz y huya de las masificaciones, que se olvide de este lugar.
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El centro del pueblo se encuentra al final de la bahía de Kalithea, atravesado por la carretera de la costa y por la carretera principal procedente de Rodas. Frente a la playa está la plaza principal y alrededor de esta se desparraman los hoteles, apartamentos, tiendas, etc. Los complejos hoteleros se hallan en las afueras.
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Faliraki dispone de varias playas: la más grande e importante tiene más de 5 km de hermosa arena dorada y oscura, recorrida por una línea serpenteante de sombrillas, aunque hacia el norte es posible encontrar algún hueco libre de ellas. Tiene varias estructuras con lavabos y duchas, así como cabinas. Al otro lado del pequeño puerto de pesca del pueblo está la playa de Kathara, más pequeña y recogida; al sur de esta, hay una playa nudista a la que se accede por un camino apartado. Todas ellas están bañadas por unas aguas cálidas y transparentes.
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Hay un mini tren turístico con varias rutas, con un precio, dependiendo del recorrido. Sale desde la plaza central, al lado de la playa.
Hay agencias de alquiler de vehículos: A-ONE RENT A CAR, ( 22410 85683; J&D RENT A CAR, ( 22410 85885
Más información en www.faliraki-info.com/
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KALITHEA (CALICEA)
Población, 5.861 habitantes
Kalithea (también figura en los mapas como Kalithies), es un tranquilo pueblo de estrechas calles y animada plaza, donde se pueden visitar las iglesias de la Metamorfosis, con un altar del s. XVI, y la de Timios Stavros. Por una pista, hacia el norte, se halla el monasterio de Eleousa, con interesantes frescos.
También a 2 km está la cueva de Agios Georgios (San Jorge), en la que se han encontrado restos humanos del Neolítico. Su interior fue utilizado como santuario en época helenística y romana.
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THERMÁ KALITHEA (CERMÁ CALICEA)
A unos 10 km al sur de la ciudad de Rodas, por la carretera de la costa, se encuentra Thermá Kalithea, un singular paraje con un particular atractivo.
Asentado sobre suelo rocoso, el lugar tenía fama en la antigüedad, desde la época de la Hexápolis Dórica hasta el tiempo de los Caballeros de Rodas, gracias a la calidad de sus aguas, las cuales había mencionado el mismísimo Hipócrates por sus propiedades contra la artritis.
Los habitantes del área conocían y denominaban al manantial Tsilonero por su capacidad purgativa y lo visitaban regularmente. Ortodoxos, judíos y musulmanes se daban cita allí sin ningún problema.
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Ya en el s. XX el fascismo italiano, en su programa de reconstrucción y recuperación del esplendor pasado (del cual se consideraba garante) quiso levantar un complejo termal ayudándose de un estilo ecléctico bastante kitsch.
Sin embargo hay que subrayar que la denominación de terma, tal como eran las romanas, con el caldarium, tepidarium y frigidarium, no es correcta en este caso pues en Katithea las propiedades del agua eran beneficiosas al ser esta ingerida (para mal de estómago, hígado, etc.), no sólo para el baño.
En 1927 el gobierno de Mario Lago encargó el proyecto de un centro termal que fuese atractivo para impulsar el turismo de la isla. En diciembre de 1928 comenzaron los trabajos a cargo del arquitecto Pietro Lombardi.
El estilo elegido combinaba varios elementos, donde el oriental se imponía claramente. Esta característica arquitectura de la época se puede ver también en muchos edificios oficiales de Rodas y otras islas del Dodecaneso.
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El balneario funcionó con los italianos, atrayendo a numerosos visitantes que disfrutaban de las singulares instalaciones. Con el fin de la ocupación siguió siendo explotado por los griegos hasta 1968, año en el que el agua dejó de manar. Entró así en un estado de abandono en el que estaba hasta hace bien poco.
Actualmente se ha reconstruido y ofrece un aspecto muy similar al que tenía antaño, con ese aire oriental, un tanto fuera de contexto, que sorprende a los miles de visitantes que se acercan cada año. La visita también se puede aprovechar para darse un chapuzón en sus tranquilas aguas, tomar el sol o practicar el submarinismo.
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El complejo se compone de varia partes:
- Un portal de entrada que da acceso a un espacio abierto circular, en medio del cual hay una fuente.
- Tras esta plaza, hay un arco apuntado de estilo morisco (antaño de tonos ocres), que se abre a un corredor columnado cuyo techo sostenía una pérgola con buganvillas.
- Una estructura semicircular, al final del corredor, con escaleras a derecha e izquierda y en medio de la cual se encuentra un pabellón redondo abovedado. Esta bóveda tiene 14 m de alto y encierra una cisterna circular con 6 fuentes de las que mana el agua. Poseía orificios con vidrios por donde entraba la luz.
- Al final se halla una diminuta playa y un embarcadero. A su lado hay una cafetería.
- A la derecha del complejo hay una estructura circular con arcos y ventanas y un pequeño quiosco abovedado en el centro. Se comunica con otros pabellones menores.
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Todo el conjunto se halla a diferentes alturas, comunicado por escaleras, pasillos, rampas y corredores, entre jardines y vegetación tupida, que choca con lo agreste del entorno. Los suelos lucían elaborados mosaicos, las paredes tenían ventanas circulares con vidrios de colores y los techos abovedados mostraban un color rojizo.
Para más información, visitar www.kallitheasprings.gr ( 22410 65691
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AFANDOU (AFANDU)
Población: 5.933 habitantes.
Afandou está casi al comienzo de la bahía del mismo nombre, pero a 2 km hacia el interior. Difícil de distinguir desde la planicie (afandos significa invisible), está construido en una depresión natural del terreno y rodeado de verdor. Es uno de los pueblos más antiguos y auténticos de Rodas, con viejas tradiciones y festividades.
Antiguamente, hacia el s. X, era un próspero pueblo pesquero, ubicado cerca de la playa, a causa de lo cual estaba siempre expuesto a los ataques de los piratas que asolaban las costas de las islas. Cansados de ello, los habitantes decidieron instalarse en el interior, hacia las montañas, eligiendo el lugar y el nombre que presenta hoy en día. Sólo una muestra ha quedado del viejo asentamiento: la iglesia, antes en pleno centro, de la Panagía Katholiki.
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Afandou es conocido, sobre todo, por su excelente campo de golf de 18 hoyos, que pertenece al Afandou Rhodes Golf Club. www.afandougolfcourse.com
El corazón del pueblo es la plaza principal, situada al noroeste, en la que, entre las sombras de los árboles, destaca la imponente iglesia de Kímissis Theotokou, con su alto campanario. En el propio centro se hallan los servicios básicos: ayuntamiento, policía, taxis, servicio médico, correos así como un pequeño museo sobre las tradiciones de la localidad. Por la ciudad es posible ver algunos talleres y pequeñas factorías donde todavía se fabrican hermosas alfombras a mano.
QUÉ VER
PANAGÍA KATHOLIKI: se encuentra al sureste, de camino a la playa. Está levantada sobre los restos de una basílica paleocristiana. En su construcción se han aprovechado varios capiteles antiguos y en su interior se muestran varios frescos, bastante mal conservados. La primera basílica se debe al s. V, pero fue destruida por un terremoto. Se reconstruyó en el s. VIII, siendo destruida por otro seísmo y nuevamente reconstruida en el s. XVI, quedando como está en la actualidad. Enfrente hay un estiatorio interesante para comer. El día 15 de agosto se celebra la fiesta de la Panagía, de gran importancia en el pueblo.
PROFITI ILÍAS: iglesia situada al sureste de la plaza, en lo alto de una colina. Permite una interesante vista.
MUSEO DEL FOLCLORE: está en la plaza central, justo detrás de la iglesia. Contiene objetos del folclore y la vida cotidiana del pueblo, así como elementos litúrgicos. El horario es de 10 a 12 h, de lunes a viernes. Si está cerrado, preguntar en cualquier taberna de la plaza.
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KOLYMBIA
Población, 317 habitantes.
Pequeño pueblo agrícola y pesquero convertido en un importante centro vacacional, con grandes complejos turísticos cuya actividad gira en torno a la playa, que serpentea a lo largo de algo más de 2 km de costa.
Desde el pueblo trascurre una carretera de 2 km, sombreada por eucaliptos, con un arcén para el paseo y un carril bici. Desemboca hacia la explanada del cabo Vagia y a la playa, lugar ideal para el baño ya que sus aguas son muy tranquilas, si bien casi toda la arena está repleta de sombrillas y tumbonas.
La playa principal, delimitada por extensas zonas verdes, está muy concurrida debido a que da directamente a los hoteles y urbanizaciones de apartamentos. Se pueden practicar actividades acuáticas y alquilar botes a pedales. Dirigirse para ello a los embarcaderos flotantes.
La playa situada al noreste es más interesante. Tiene un pequeño puerto resguardado donde fondean los barcos de pesca y las embarcaciones de recreo.
ARHÁNGELOS (ARJÁNYELOS)
Población, 5.752 habitantes |
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Arhángelos (también se escribe Arkhangelos o Archangelos) está situado entre colinas, rodeado de cultivos de cítricos y a la sombra de un castillo medieval. Este es uno de los pueblos más tradicionales de Rodas, cuya economía se basa en la agricultura y en la artesanía, destacando el calzado (con las botas altas, que antaño protegían contra las serpientes), los bordados y las alfombras, realizados a mano, y, sobre todo, la cerámica con fama en toda la isla.
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También destacan las típicas casas, pintadas con colores vistosos (como en Koskinoú), portales y patios floreados y una rica decoración interior.
El lugar estuvo habitado ya desde época micénica, según algunas evidencias halladas. El pueblo en sí se levantó en la Edad Media alrededor del castillo que daba protección ante los ataques de los piratas que asolaban las costas, una historia muy común en muchos pueblos del Dodecaneso. Fue entonces bautizado con el nombre de Arhángelos en honor al arcángel Miguel, protector de la población, cuya iglesia destaca desde cualquier parte de la localidad. Tiene un patio pavimentado con guijarros y una curiosa torre campanario llamada popularmente “pastel de boda” por su forma piramidal.
QUÉ VER
LA FORTALEZA: el castillo de Arhángelos se construyó en 1467 sobre los restos de una fortaleza bizantina, bajo el mando del Gran Maestre Orsini, formando parte de una de las 12 fortalezas que vigilaban la costa de los piratas. Hoy en día quedan pocos restos en pie, apenas el muro exterior, pero merece la pena la ascensión para admirar algunos escudos de la Orden, la pequeña iglesia de Agios Georgios (San Jorge), situada cerca de la entrada, en la que se puede ver un fresco del santo matando al dragón, y, sobre todo, la excelente vista panorámica del pueblo y su entorno.
MUSEO DEL FOLCLORE: muestra numerosos útiles domésticos y agrícolas, telas y bordados representativos del pueblo y algunas piezas arqueológicas encontradas en el lugar.
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STEGNA
Esta antigua aldea de pescadores, a 3 km de Arhángelos, se ha convertido en un enclave turístico donde los apartamentos proliferan a un ritmo frenético. El pueblo consiste en una tranquila playa de arena con un hermoso paseo marítimo detrás del cual se apiñan los edificios entre la tupida vegetación. La playa dispone de diversos servicios: sombrillas y tumbonas, duchas, casetas para cambiarse y la posibilidad de practicar algunas actividades acuáticas así como un plácido baño en sus limpias aguas. En el extremo sur hay un pequeño embarcadero con barcas de pesca que proveen a los restaurantes de la zona.
Hay un par de lugares donde alguilar un coche: CHRISTINA RENT A CAR, ( 22440 24177 y DIMITRA CARS, ( 22440 23046
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HARAKI (JARAKI)
Población, 65 habitantes.
Otro pequeño pueblo de pescadores transformado en centro turístico, aunque conserva cierto aire de tranquilidad propiciado porque otros lugares cercanos copan una mayor atención. Las pocas casas originales se han visto rodeadas por numerosos edificios enfocados al turismo.
La pequeña y hermosa bahía se abre en torno a una amplia playa de guijarros (zona derecha) y arena (zona izquierda) que tiene continuación, hacia el sur, en el extenso arenal de Kálathos. El plácido paseo marítimo separa la playa y las casas blancas que miran al mar. Algunas sombrillas y tumbonas y mucha superficie para relajarse sin nadie alrededor. Pero lo mejor es el baño, en unas aguas cristalinas, esta inmensa piscina supone una delicia.
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LINDOS
Población, 1.091 habitantes.
Es el segundo destino turístico de Rodas, por detrás de la capital, muchos de cuyos visitantes (se estima que casi 30.000 diarios) apenas permanecen unas horas de visita.
Declarado Patrimonio de la Humanidad por su alto valor arquitectónico y cultural, si se observa desde la distancia, llama la atención su estructuración en 3 niveles: en el más bajo, está el mar, las playas y los puertos; en el nivel medio están las casas blancas entre la vegetación; en el superior se eleva la acrópolis, cerrada por las murallas medievales.
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Lindos comenzó su andadura hacia el s. XII-XI a C. de manos de los dorios, que se aprovecharon de sus puertos naturales. Llegó a fundar diversas colonias en Sicilia, sur de Italia, costas de Asia Menor e islas, llegando a ocupar una importante extensión de terreno como ciudad-estado, comprendiendo 12 demos (municipios). En el s. VII a. C. se une a las otras dos ciudades-estado de Rodas y, junto con Halicarnaso y Knidos, crean la hexápolis doria.
El apogeo de Lindos culmina en el s. VI a. C. con Cleóvulo, monarca considerado uno de los 7 sabios griegos de la Antigüedad, que realizó importantes obras públicas y reanudó el culto a Atenea, reconstruyendo el santuario de la diosa lindia (destruido posteriormente por un incendio en el año 342 a. C.).
En el s. I, cuentan las crónicas, desembarcó San Pablo en la bahía del mismo nombre y dio pie a la introducción del cristianismo en la isla.
En el período romano, Rodas se integra en la provincia de las islas (s. III) y Lindos inicia un lento declive a causa de la fuerte competencia comercial.
La división del Imperio Romano (395) sitúa a Rodas en el mundo bizantino, momento en el que Lindos refuerza la acrópolis, convirtiéndola en una fortaleza ante los ataques de los piratas.
Los Caballeros de San Juan, llegados a la isla en 1306, establecen en Lindos una de las más importantes fortificaciones a lo largo de la costa, para la defensa y refugio de la población.
Bajo el dominio turco, se instala una guarnición en la fortaleza, pero los invasores dan libertad al pueblo para el desarrollo comercial y marítimo, que conoce un buen momento, como también lo hace la particular cerámica lindia.
A partir del s. XVII se construyen las denominadas “casas de los capitanes”, reconstruidas hoy gracias al turismo, que forman parte de la inconfundible arquitectura del pueblo.
Desde la segunda mitad del s. XX, cuando Rodas comienza a cobrar importancia como destino turístico, Lindos se adecenta y acondiciona para ser lo que es hoy, la localidad más hermosa de la isla.
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QUÉ VER
IGLESIAS: Desperdigadas por el núcleo urbano, muchas veces desapercibidas, se encuentran las distintas iglesias de Lindos. Destacan: IGLESIA DE LA PANAGÍA, AGIOS GEORGIOS O JOSTÓS, AGIOS GEORGIOS PAJIMAJIOTIS y AGIOS PAVLOS, entre otras.
LA ACRÓPOLIS: tiene forma triangular y está estructurada en 4 terrazas. La entrada se halla en la parte noroeste, llegando a la primera terraza. Al girar para encarar la pendiente que conduce al interior de la fortaleza, se puede ver la popa de un trirreme, una nave de tres filas de remos, esculpida en la roca en honor a Agesandro, como lo indica una inscripción. A la izquierda hay una exedra (estrado semicircular), también de piedra, de época helenística.
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Al subir por las escaleras se llega al Palacio de Administración, de la época de los Caballeros, alargado y con varias bóvedas, contiene restos de altares, basas e inscripciones, rescatadas por los arqueólogos.
En la explanada; en la parte norte, al lado de la torre, están los restos de un pequeño templo de planta sencilla; volviendo hacia el sur, hay una escalinata flanqueada por 12 bóvedas y, a sus pies, una exedra.
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Subimos las escaleras y nos encontramos un amplio patio, donde se halla un pórtico de época helenística en forma de “U” que cubría todo lo largo de la plaza (87 m de largo y 42 columnas dóricas), a semejanza del Altar de Pérgamo. A la derecha quedan los restos de la iglesia de Agios Ioannis (San Juan), de 3 naves y otros tantos ábsides, construida por los Caballeros sobre otra más antigua y convertida en mezquita por los turcos.
Ascendemos por la gran escalinata y llegamos a la última terraza, donde se halla la parte más importante del complejo, el templo de Atenea Lindia. Pero antes de llegar a él, atravesamos otro pórtico, más pequeño que el anterior, del que no quedan más que los dos escalones que marcan toda su extensión. Pasamos a un amplio patio y, en el extremo suroeste de la acrópolis, que supone el vértice del triángulo, vemos el templo dedicado a la diosa de Lindos.
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El templo de Atenea Lindia está situado en el punto más alto de la acrópolis. Su origen parece estar en el s. IX a. C. En el s. VI a. C. fue destruido por un incendio, siendo posteriormente reconstruido. Los restos del templo que vemos hoy pertenecen al s. III a. C. Es de tipo anfipróstilo y estilo dórico. La restauración que se lleva a cabo muestra las 4 columnas del pórtico delantero, dos de las cuales sostienen los restos de un entablamento, y 3 del pórtico trasero (opistódomos); los muros delimitan el espacio interior, en el que se aprecia el lugar donde se hallaba la estatua de la diosa.
En la base de la acrópolis hay varias cuevas en las que se han hallado algunos restos antiguos. En ellas se celebraban ceremonias religiosas a lo largo del tiempo. Su acceso se realiza por un desvío que parte hacia la izquierda desde el camino a la acrópolis.
( 22440 31258Para información sobre horarios y precio, visitar www.ando.gr/upload/files/eot/OPEN.pdf La empinada subida también puede realizarse a lomos de un burro desde un poco más adelante de la plaza principal. Su precio es de unos 6 €.
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PEFKOS
Población, 180 habitantes.
A 6 km al suroeste de Lindos, se encuentra el pueblo (o más bien habría que denominarlo resort) de Pefkos, también llamado Pefki. En realidad se trata de un montón de edificios, en especial hoteles y apartamentos, aunque también cafés, restaurantes, tiendas y otros establecimientos de ocio estival, desperdigados por una amplia zona. El lugar no tiene otro interés que su playa de arena dorada, flanqueada por una densa arboleda.
Detrás de la pequeña península que la limita se encuentran varias calas rocosas con arena y algunas sombrillas, más tranquilas que la playa principal, si bien el acceso no es fácil. A partir de aquí se abre la bahía de Lardos. Para llegar, tomar cualquiera de los desvíos a la izquierda de la carretera.
Hay mucha oferta de alojamiento, aunque suele estar ocupada por los grandes operadores. Puede encontrarse algún apartamento o habitación libre, para ello es mejor preguntar en las agencias de Lindos. Cerca de la parada del autobús hay un bar (Eagli) que dispone de piscina con entrada libre. Para tomar algo o picotear, sobre la playa está el bar “Flyer’s Café” (( 22440 48177), donde sirven platos combinados. También existe la posibilidad de dar un paseo en avioneta con Nikos. Preguntar en el mismo establecimiento.
Para llegar, hay que continuar por la carretera sur de Lindos, hacia Kiotari-Gennadi; a unos 4 km hay un desvío a la izquierda que conduce a Pefkos.
LARDOS
Población, 1.212 habitantes.
Lardos es un apacible pueblo, a unos 9 km de Lindos por la carretera sur. Merece una visita por su animada plaza y sus tabernas y cafés. Si se va en coche hay que tener cuidado con el lugar en donde se deja, pues en la plaza y calles adyacentes ponen multa con mucha facilidad.
Cerca de la plaza, en la calle en dirección a Gennadi se encuentra la tienda-taller de Nikandros, con una amplia gama de pinturas y cuadros con motivos griegos y precios para todos los bolsillos.
Cinco km al este, por un camino secundario está el monasterio de Panagía Ipseni, en una isla del verdor.
A unos 2 km al sur del pueblo, esta la playa, en la bahía del mismo nombre, rodeada de inmensos bloques de apartamentos y hoteles. El largo arenal dispone de sombrillas, tumbonas y una larga oferta de alojamiento, si bien casi todo es turismo organizado. Cerca, hay una zona de camping. Cafeterías, tabernas, tiendas y mucho espacio para aparcar. El agua es cristalina y, evitando las horas de mayor afluencia, es posible disfrutar de un apacible baño.
A unos 9 km al sur de Lardos, por la costa, hay otra playa más recogida, aunque bastante frecuentada. La playa de Glystra tiene una amplia oferta turística, no en vano muy cerca se encuentra el inmenso resort de Kiotari.
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